Efectivamente solo ha hecho falta una temporada de escaso
éxito para que el club blaugrana vuelva a la mediocridad a la que nos tienen
acostumbrados. Según la madre del filósofo Forrest Gump “tonto es el que hace
tonterías”, y últimamente desde el club blaugrana nos están abrumando a base de
simplezas mentales, algunas de las cuales no presentan ni el más mínimo rastro
de moralidad.
Esta temporada el Real Madrid ha superado deportivamente al
club catalán, y casi de manera automática han empezado a aflorar las
mediocridades que históricamente han caracterizado a este club. En primer
lugar, la huida de Pep Guardiola. Al igual que las ratas y el capitán del Costa
Concordia, Guardiola abandonó el barco en cuanto vio que se hundía. Se fue en
el momento en el que más se le necesitaba.
Desde entonces se han sucedido una serie de noticias
circenses que convierten los periódicos en noticiarios de humor a la altura de
El Jueves.
El Barcelona es un club que históricamente ha sido
beneficiado por los indultos de Villar. Las amnistías en el caso del cochinillo
y en el caso de la Copa
del Rey son ejemplos de esto que comento. Llegados a este punto me gustaría
recordar un par de cosas que están cayendo en el olvido y que no podemos
permitir que ocurra. El día de la vuelta de Figo al Camp Nou pasó a la historia
como el día del cochinillo, pero este nombre es injustamente escaso ya que se
tiraron, a parte de la cabeza de ese animal, dos botellas de whisky, bolas de
billar y más de una quincena de teléfonos móviles, lo cual no provocó una nueva
desgracia ya que en ese campo le abrieron la cabeza a Roberto Carlos y a
Helguera, con total impunidad en otras ocasiones. Además el partido fue
calentado previamente por la directiva culé y en las gradas pudimos ver
pancartas con lemas tan civilizados como “Figo muérete”. El Real Madrid retiró
este año una pancarta en la que se podía leer “Mou, tu dedo nos señala el
camino”, y aun así la sociedad culé se escandalizó. Después del partido el
presidente del Barcelona dijo que Figo
provocó al publico sacando los corners, lo cual era lo habitual en el equipo
merengue. En cuanto a la espantada en Copa del Rey solo destacaré que en el
partido de ida el Atlético de Madrid le había metido tres goles al club
blaugrana, por lo que a parte de vergonzoso también fue un acto cobarde. Pues
nada, estos indultos nunca fueron un problema, ni siquiera fueron criticados
por el Real Madrid, por eso me irrita tanto tener que leer noticias como las
pataletas del doble del Puma, Toni Freixa.
La última llantina indecente viene del aficionado culé.
Resulta que algunas peñas del club blaugrana quieren que la Supercopa sea disputada
por su filial. Proponen esto como medida de presión por el indulto a Mourinho,
y también porque según ellos no somos dignos de jugar contra el Barcelona. Yo
creo que un equipo que te saca 9 puntos en Liga es digno rival. Es más,
recordemos que el partido de vuelta se juega en el Bernabeu, ya que el título
de mayor empaque lo ganamos nosotros. Estoy totalmente convencido que la afición
culé quiere hacer lo mismo que hiciera su club en la temporada 1999/2000, huir
de una competición por miedo a la derrota. Derrota que se producirá sin lugar a
dudas para regocijo del aficionado blanco.